La personalidad de los Tauro
La Tierra gira recorriendo un ciclo eterno y rítmico, a través de las doce casas del Zodíaco. Los que creen en él piensan que, cuando el planeta penetra en la esfera de influencia de cada casa, sus poderes lo empapan todo. Y, además, cada cuerpo celeste con el que la Tierra interactúa, tiene un poder específico que refuerza o distorsiona lo que esa casa del Zodiaco determina.
Cuando empieza el año, nuestro planeta pasa primero por la casa de Aries, que hace que las plantas y los animales despierten en una explosión primaveral. Y luego, entra en la zona de Tauro, donde dicen los aficionados a estas cosas, se potencia la procreación.
Las mejores rutas para correr en un libro
En los últimos años, el running se ha puesto de moda. Nos hemos dado cuenta de que correr tiene un efecto liberador de estrés y que, al mismo tiempo que es uno de los deportes más sanos, libera el cerebro y ayuda a estar en forma mental y físicamente.
Quizás después del confinamiento, todos tenemos unas ganas locas de salir a la calle, pero no siempre puedes coordinar a varios para prácticar un deporte de equipo, en plan partido de baloncesto, de fútbol o de pádel. Con los horarios, los niños, el estrés diario… es prácticamente una misión imposible.
Por eso, el running ha ido captando cada vez más adeptos.
Para muchas personas, de hecho, el running se ha convertido en un hábito tan necesario como el respirar. Adelgaza, mejora tu circulación, tu condición física, tu musculatura y disminuye tus niveles de ansiedad, mejorando tu estado de ánimo. Todo son ventajas.
Tanto si eres ya un corredor experimentado como si acabas de calzarte la zapatillas para empezar, nunca es una tontería conocer nuevas rutas para correr y para prácticar este deporte y para entrenar. Casi todos, repetimos hasta la saciedad las rutas archiconocidas de nuestras propias ciudades, siempre el mismo parque, siempre el mismo paseo porque es el que menos problemas de coches tiene.
La verdadera historia de Drácula
Vlad Drakul Bassarab, también conocido como el «conde Drácula» fue el único superviviente de la dinastía Bassarab de Valaquia, que es una parte de la actual Rumanía. Los Bassarab —que reinaban en esa provincia— bajo el nombre de Vlad I, II, III, etc. tuvieron que defender su trono de las invasiones de mongoles, turcos, húngaros y demás invasores y eso les grabó a fuego un ansia de sangre insaciable.