La creatividad es una criatura voraz que digiere todo aquello que nos inspira. Paisajes, instantes, imágenes, sonidos, olores… todo tiene potencial para formar parte de un diseño o de una ilustración. Pero si hay algo que es un recurso inagotable ese algo son los libros.
En una época en la que las bibliotecas están limpiando sus estantes a favor de la lectura digital, ¿qué nos hace estar aquí hablando de coffee table books que son 100% papel?
Puede que en The Galobart seamos algo nostálgicos y nos guste el libro como objeto de deseo. Y, aunque sea peligroso hasta cierto punto pensar en los libros como objetos de decoración, hay mucha verdad en la idea de que son objetos hermosos impresos.
Para los profesionales creativos, los libros deben ser tan agradables visualmente como intelectualmente intrigantes.
Por lo tanto, para los ilustradores, los diseñadores gráficos, los artistas de la imagen… los coffee table books son el regalo perfecto.
Los cofee table books, de los que ya te hemos hablado en el blog, son libros para inspirarnos. Siempre a medio camino entre el objeto de decoración y el libro, son obras de diseño exquisito, en las que las editoriales que nos dedicamos a esto invertimos horas, porque su edición minuciosa va desde la calidad del papel (el medio perfecto para apreciar la fotografía o la imagen en toda su belleza) hasta la de la fotografía en sí.
Coffee table books los hay de todos los estilos y tamaños.
El libro del que queremos hablar hoy explora cómo actúan los colores sobre nuestros sentidos. Lo explora desde la perspectiva de un pintor holandés del siglo XVII —A. Boogert— en una obra detallada en la que presentaba en acuarela los colores y sus escalas, descubriendo al mundo los matices de los mismos al mezclar unos con otros.
¿Qué hace que este coffee table book en concreto sea el regalo perfecto para un diseñador o un ilustrador?
Puede que te digas a ti mismo: «bueno, tiene que ver con su oficio y es un objeto de diseño». Sí. Pero también muestra quién es. El proceso de pensamiento que usamos para elegir un color o un complemento es el mismo que se sigue para exhibir un libro en una parte de la habitación. Ese libro en concreto le dice a esa persona cómo ves su personalidad, qué intereses valoras.
Colocar este libro en una mesa de café es una declaración silenciosa de tu personalidad.
Gran parte del hecho de que los cofee table books se siguen vendiendo —y de eso damos fe nosotros como amantes de este estilo de libro— es que su contenido despierta asombro. Traité des couleurs servant à la peinture a l’eau está plagado de imágenes impresionantes que nos llevan a una época donde el oficio de artista era otro distinto.
Simple, pero elegante al mismo tiempo. Con las cubiertas y los lomos imitando el original, brinda personalidad a cualquier superficie del salón.
En resumen, este libro es el creador de una declaración de principios.
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